El ruido y su forma distorsionada seguro son lo llamativo, que hace al gato jugar con estas bolsas.
Jugar con bolsas incluso ha sido el juego de niños, el ruido es muy peculiar y verlas en abundancia da ganas de andarlas pateando o incluso tirarlas al aire.
Este gatito nos muestra como es feliz, yendo de una bolsa a otra, saltando y atrapándolas.
Los gatos y su curiosidad son sorprendentes, pero incluso a nosotros nos llaman la atención las bolsas.